«MUSEU DAS REMOÇÕES. Resistencia social y creativa contra la ciudad neoliberal de Rio de Janeiro»

El pasado martes 20 de junio de 2017, tuvimos el privilegio de contar en la Casa-Palacio con la presencia de la arquitecta y urbanista brasileña, Diana Bogado. Diana, vino a dar una charla sobre su Trabajo de Fin de Máster titulado: «Museo de los desalojos. Resistencia social y creativa contra la ciudad neoliberal de Río de Janeiro«, una tesis activista estrechamente relacionada con las prácticas de extensión universitaria en Brasil y la cultura ocupa y en donde se puede observar una excelente combinación entre arte, movimientos sociales y Universidad para proteger y mantener un barrio.

Esta conferencia ha sido especialmente interesante por el propio proceso que estamos llevando nosotrxs, como vecinxs de un determinado barrio, el Pumarejo, y ante las distintas amenazas y peligros que, como bien dice nuestro amigo Salvador, corremos: » gentrificación, turistificación, el conflicto con el Ayuntamiento para la definición de los usos y  la gestión futura de la Casa-Palacio«. Asimismo, conocer procesos similares a los nuestros y, sobre todo, procesos que han tenido éxito, puede ayudarnos a encontrar, crear, adaptar, promover etc. otras estrategias e iniciativas distintas a las que se han estado llevando a cabo durante estos 17 años de incansable lucha y, sobre todo, como una importante fuente de energía, motivación y confirmación de que ¡SÍ SE PUEDE!

Pasamos, a continuación, a explicar el caso de la favela de Vila Autódromo de Río de Janeiro y objeto de esta conferencia.

Con las sucesivas postulaciones a la candidatura y, finalmente, la elección de Rio de Janeiro como sede de los Juegos Olímpicos para el 2016, se llevaron a cabo una serie de proyectos urbanísticos de gran calado, especialmente por el 2012. Estas iniciativas tenían de trasfondo y promovían un determinado modelo de ciudad, de corte neoliberal, muy distinto al que existía. Uno de los referentes ha sido la Barcelona Olímpica. Las transformaciones, ya desde los años 90, han sido espectaculares: se llevaron a cabo procesos de gentrificación y de limpieza étnica (especialmente de la población afrodescendiente), cambios en la morfología urbana (construcción de grandes avenidas, plazas, etc.)…, pero, sobre todo, se genera una gran cantidad de desalojos en torno a la zona interesada.

Rio de Janeiro es una de las ciudades latinoamericanas que más favelas posee. Éstas y sus gentes, para la nueva concepción de ciudad que dijimos anteriormente (una sociedad de consumo y no de convivencia), representaban un verdadero problema. Así es como estas zonas se han ido militarizando paulatinamente (con la excusa de acabar con el narcotráfico) y se han llevado a cabo importantes procesos de gentrificación.

La estrategia política para realizar todo esto ha sido la asociación público-privada. El propio Estado es cómplice de lo que están haciendo las grandes constructoras, ya que no ejerce sobre ellas ningún tipo de control ni limitación y permite la ilegalidad de muchas de sus acciones:

–          Se dan tierras públicas a estas empresas privadas (el 75% de las tierras del Parque Olímpico son regaladas) como forma de pago de las infraestructuras.

–          Se les concede un amplio margen de libertad y de toma de decisiones: se desaloja a la población autóctona (generalmente de clase baja) y se venden las nuevas construcciones a personas de clase media-alta.

–          Lxs trabajadorxs de estas constructoras suelen estar en condiciones precarias y en régimen de explotación.

–          Se reducen espacios de carácter público, cuya principal consecuencia es la eliminación del entramado social.

–        Se acentua la segregación en Río por áreas y por barrios según el estrato socioeconómico al que pertenezcas: esa población autóctona de clase baja suele ser trasladada hacia la periferia. Mucha diferenciación social en un mismo territorio que muchas veces se materializa en la realidad con el levantamiento de muros simbólicos, y no tan simbólicos, que delimitan las distintas partes de la ciudad.

El caso del que vino a hablarnos nuestra compañera, y ya amiga, Diana, es el de la favela llamada Vila Autódromo. En Vila Autódromo eran 60 familias las que inicialmente vivían allí y, al final de todo este proceso de lucha y resistencia por acabar con los desalojos y por quedarse en el lugar que consideraban su hogar, sólo quedaron 20, y todo ello en medio de un clima de violencia, presión estatal, conflicto de intereses entre los propios vecinos, etc. Y eso, que no era una favela que pudiera considerarse como una zona de riesgo.

Los principales aspectos e ideas a destacar del proceso que llevaron a cabo todas estas personas son:

–           El papel relevante que ha tenido aquí la Creatividad y el Arte (frente a una lógica más racional de nuestras sociedades) como estrategia de resistencia y lucha ante medidas extremas e imprevistas. 

–           La importancia de símbolos de referencia y de la existencia de lideres carismáticos. En el caso que nos ocupa, destaca doña Penha que, pese al ofrecimiento de una importante suma de dinero por irse de su casa, se negó a aceptarlo y esto sirvió de ejemplo para muchxs de sus vecinxs (no todo ha sido idílico, también ha habido rupturas internas, contradicciones, conflicto de intereses, etc.). 

–       La fuerte violencia y presión ejercida por parte del Estado a través de distintas estrategias, como por ejemplo, que sintieran que vivían en un estado de guerra constante (miedo, inseguridad, violencia),  de ahí que muchxs decidieran abandonar la lucha. También, la realización de un programa de construcción, «Minha casa. Minha vida», de viviendas VPO a las afueras de la ciudad, que era una verdadera estafa: cuando finalizaron las Olimpiadas, les llegaron a estas personas los pagos por el título de la propiedad que supuestamente les habían sido dados.

Las principales iniciativas llevadas a cabo por lxs vecinxs de Vila Autódromo, junto a otras organizaciones, la Universidad, etc., han sido las siguientes:

–          Plan Popular participativo de recalificación urbanística, junto con la universidad pública, como estrategia de lucha.

–          La constitución en Asociación de Vecinos de todas las casas de la Vila.

–         La celebración del Festival Ocupa Vila Autódromo y la realización de importantes campañas de carácter divulgativo en las redes sociales que han tenido éxito y una importante repercusión a nivel internacional, como por ejemplo, la iniciativa “Urbaniza Já”.

–          Protestas, manifestaciones, vigilias, etc. para intentar frenar e impedir los desalojos.

–          Conexión y sinergias con otros procesos de lucha y situaciones similares de desalojo, tanto a nivel nacional como internacional, que continúan hoy día.

–         La creación del «Museu das Remoçoes» («Museo del desalojo», traducido al español). Éste es un museo que se caracteriza por estar a cielo abierto y que se contruyó como una forma de resistencia, de carácter activo y creativo, y como una manera de rememorar y revalorar todo un barrio, que había sido completamente transformado y que, en ocasiones, les resultaba desconocido hasta a sus propios vecinxs (se estaban perdiendo referentes comunitarios y sentimientos de pertenencia). Además, también ha servido como cauce para mantener vínculos entre los antiguos vecinos y los actuales.

Todo este proceso finalizó con la aceptación y permiso, por fin, por parte del gobierno de que esas 21 familias, que habian aguantado y resistido fuertemente, vivieran en el espacio que antes constituía la favela, aunque ahora esta quedase reducida a una mera calle larga, a partir de la cual se disponen las distintas casas.

A pesar de que la lucha haya sido emocional y temporalmente muy dura y larga, existe entre lxs vecins unos sentimientos de orgullo y éxito, puesto que el gobierno tuvo que ceder finalmente ante la lucha, además de que no consiguieron llevar íntegramente a cabo su plan de desalojo. 

En este caso, la Creatividad, en mayúsculas, y el tejido social/ relaciones sociales se han constituído como un factor de resistencia determinante. El lema que solía circular entre lxs vecinxs era el de «Nosotrxs por nosotrxs» y es que, si unx mismx (bien como colectivo, bien como individuo) no busca cubrir sus propios intereses/necesidades, ¿quién lo va a hacer?

Para más información: https://pt-br.facebook.com/museudasremocoes/